No se cual será la razón, pero todas recetas que me vienen a la mente siempre ocurre cuando estoy dando un paseo por la ría o por el campo. Parece una tontería dedicarse a elaborar hoy en día recetas tradicionales o especiales, cuando puedes ver en las redes sociales cualquier tipo y de cualquier País. Pero eso no me importa, suelo hacerlo por saber el resultado final de mi idea, y si el resultado final es como yo me pensaba, siempre lo comparto con el fin que, algún atrevido o atrevida lo realice, lo divulgue y no se pierda en el tiempo.
Este fin de semana estaba dándole vueltas a la cabeza por aprovechar unos ingredientes que tenía en el congelador, y la verdad es que, gracias a ellos, realicé una receta con un sabor final exquisito.
Es muy simple y económica, pero es imprescindible no variar nada de lo que os explico.
Ingredientes:
- 1/4 kilo de calamares pequeños
- 8 Gambas tipo grande (pueden ser congeladas)
- 3 Patatas
- Aceite de oliva
- Sal gruesa
- 3/4 litro de caldo de pescado (puede ser envasado)
- 10 avellanas o almendras tostadas
- Perejil
- 2 dientes de ajo
- 1 Cayena
- Pimentón de La Vera
- 6 Palitos camperos (pequeños)
- 1/2 vaso pequeño de sidra
Pelar las patatas, y después de lavarlas cortarlas en rodajas de 1/2 cm. Se coge una sartén y se fríen (no muy hechas) en varias tandas para que no se peguen.
Se van colocando haciendo una cama en una olla plana. A continuación, se van colocando los calamares limpios sin quitar la piel y las aletas (sólo la pluma y la cabeza).
Posteriormente se pelan las gambas y se añaden a la cazuela la cual todavía no está al fuego. En otra olla alta y estrecha se echa el caldo junto con las cabezas y los restos de las gambas y se pone a cocer. Se añade media cucharadita de pimentón y se deja cocer media hora.
Una vez terminado el caldo, se añade a la olla de las patatas previamente pasándolo por el colador. Se pone a calentar y mientras alcanza su temperatura, se coge el mortero y se añade machacando por este orden, lo siguiente: la sal gruesa, los ajos cortados a lonchas, las avellanas, el perejil, la cayena, los palitos y el pimentón.
Una vez todo bien pasado, se añade un poco de aceite y la sidra. Se remueve todo y se espera a que la olla empiece a hervir para añadirlo. Se mueve un poco y lo dejamos unos 20 minutos. Se deja reposar unos cinco minutos y ya podéis servirlo.
Buen provecho.
Miguel Sánchez del Río González-Anleo
No hay comentarios:
Publicar un comentario