jueves, 30 de julio de 2015

SARDINAS ESTILO SABUGO

No todo el mundo conoce el famoso barrio de Sabugo. Este barrio está situado en la Villa de Avilés donde habitaban los valientes marineros que allá por los años cuarenta se hacían a la mar en traineras con el único objetivo de poder arrebatarle al temido Cantábrico sus múltiples variedades de exquisitos pescados y mariscos.

Cargados de experiencia por sus labores, dedicaron muchas de sus horas libres no solo a contar sus hazañas, sino que  reparaban las artes de pesca y experimentaban suculentas recetas empleando aquellos pescados y mariscos que en aquella época no tenían aprecio alguno por los consumidores.

Fruto de ello, han salido múltiples recetas capaces de saciar a los paladares más exigentes. La que os redactaré a continuación, ha sido transmitida por generaciones y caída en mis manos por mis antepasados.

Tengo que decir en beneficio de otras recetas en las que se aplica como principal ingrediente la sardina, que en esta se evita el fuerte olor desprendido bien por su fritura o plancha.

Ingredientes:

        - 1 Kg. de sardinas tamaño mediano (14 cm.).
        - Sal gruesa.
        - Una guindilla tipo chile.
        - Aceite de oliva.
        - Perejil.
        - Un diente de ajo.
        - Un vaso de vino blanco seco.
        - Una cucharada de pan rayado.

Empecemos por esa labor tan desagradable para muchos que es la limpieza del pescado. Debo indicaros que en mi caso me gusta y concretamente la limpieza de las sardinas debe hacerse de la siguiente forma:

1. Utilizar unas tijeras de pescado, introduciendo la punta por lo que realmente es el ano de la sardina, realizando un corte hacia arriba llegando a las agallas.

2. Una vez realizado el corte meter el dedo y quitarle todas las tripas, lavando posteriormente al chorro del agua fría con precaución de no abrir demasiado la apertura.

3. Colocar todas ellas limpias en un escurridor.

En un mortero, deberéis por este orden echar: la sal, el diente de ajo cortado en finas laminas, el perejil y la guindilla.

Una vez triturado bien con el mazo, echar el aceite y el vino blanco, hasta completar el mortero, batiéndolo todo muy bien.

Una vez realizada la operación anterior, todo consiste en ir introduciendo (bien con una cuchara de café) en el interior de cada sardina la mezcla realizada.

Ahora se trata  de utilizar una bandeja de horno y colocar las sardinas con el relleno de forma que la abertura quede lateralmente hacia arriba, realizando hileras en las cuales cada cabeza de la sardina coincida con la cola de su compañera.

Una vez todas colocadas se les echa por encima la mezcla sobrante, un poco de sal si no tenéis problemas de colesterol, y el pan rayado.
A continuación se coloca la bandeja en el horno previamente calentado a unos 200º C, y a esperar unos veinte minutos, procurando ir regando por encima con una cuchara de madera la salsa que vaya soltando. A media cocción pasar el horno al sistema grill, para que se doren por la parte de arriba.


Una vez hechas, presentar en la mesa con rodajas de limón procurando que no se enfríen.

Buen provecho

CALAMARES CON TINTA AJENA

Una receta económica, apetecible no solo por su color sino por su sabor. Fácil de acompañar y puede servir tanto para una comida como para una cena.

Los ingredientes principales los podéis encontrar en cualquier supermercado siendo por este orden los siguientes:

Ingredientes:

        - 1 Kg. de calamares congelados.
        - 2 Sobres de tintas congeladas.
        - 1 Cebolla grande.
        - 2 Ramas de perejil.
        - 2 Dientes de ajo.
        - 3 Cucharadas de tomate triturado.
        - 1 Cucharada de pan rayado
        - Aceite de oliva.
        - Medio vaso de vino blanco
        - Sal.

Se limpian los calamares al chorro de agua, eliminándoles las tripas, la piel y la pluma, reservando los tentáculos.

Una vez limpios los calamares, se cortan en rodajas y se dejan escurrir junto con las cabezas.

En una sartén se pone a calentar el aceite y se frien los ajos y el perejil picado todo muy fino. Mientras en una picadora o a mano se pica la cebolla (si no se tiene experiencia se puede pasar por el rallador), una vez realizada esta operación se pone en la sartén y se sofríe por espacio de diez minutos sin que se dore.

A continuación se echa el tomate y un poco de sal, se deja sofreír y se pasa a una tartera de unos 40 cm. de diámetro y de poca altura previamente calentada.

Una vez la salsa caliente se le añaden los calamares y se sofríen dándoles vueltas con una cuchara de madera. A continuación se añade una cucharada de pan rayado y se revuelve todo.

En un cuenco o mortero, se disuelven las tintas con el vino blanco y se añaden a los calamares.

Se les da un par de vueltas con la cuchara de madera y se dejan a fuego lento con cuidado que no se peguen.

Aproximadamente en unos veinte minutos pueden estar listos para consumirlos, los cuales podéis acompañar de patatas fritas cortadas en dados, o de arroz blanco.

Buen provecho




NO TENGÁIS MIEDO

Es de todos sabido que la cocina entraña un riesgo que por supuesto debe ser conocido, no solo por el usuario, sino por todos lo que la rodean, y en especial por los pequeños de la casa.

Todo el mundo es capaz de dar un consejo, pero en estos días los consejos de nuestras madres, abuelas y demás familia son insuficientes. La tecnología avanza muy de prisa y la cocina no deja de ser un foco de accidentes para los cuales debemos estar preparados y ser capaces de aplicar unos medios preventivos.

Es imprescindible antes de emprender a manejar un electrodoméstico, utensilio o menaje, leer las instrucciones de uso y manejo y no pretender hacerse el entendido dado que podemos provocar accidentes irremediables.

Por supuesto que no tenemos que tener ningún miedo a la hora de cocinar un simple huevo frito, pero si tenemos que conocer las precauciones a tomar, sino acabaremos con los brazos llenos de marcas de quemaduras.

Tenemos que pensar en unas normas básicas de precaución a cumplir a rajatabla y por supuesto que agradecería a las competencias docentes que las incluyan en las horas extraescolares.

1. Estamos jugando con fuego, por lo tanto, el gas y la electricidad deben merecer nuestra atención y dedicarles unos minutos de nuestro tiempo antes y después de elaborar nuestros suculentos manjares.

2. Los útiles de corte deben estar lo suficientemente afilados, y utilizar cada uno para lo que esta concebido. El querer cortar un producto con un cuchillo inadecuado y mal afilado puede provocar un fatal accidente.

3. Cada pieza de la batería tiene su cometido y no debemos emplearlas en operaciones a las cuales no están destinadas.

4. La limpieza adecuada de los utensilios haciendo caso de las instrucciones del fabricante, puede ser no solo signo de larga duración, sino ademas un correcto mantenimiento y seguridad del equipo.

5. Las conexiones eléctricas fuera de normativas y sin un mantenimiento adecuado son armas mortales para los manipuladores de las mismas. Ante cualquier signo de deterioro, deberán ser reparadas por personal especializado. No deben utilizarse remedios caseros para salir del paso, repito os estáis jugando vuestra vida y la de los demás.

6. El agua, aceite o cualquier otro liquido caído sobre el suelo, puede provocar caídas fortuitas capaces de originar graves accidentes.

7. Debéis prestar especial atención al funcionamiento de ciertos equipos como pueden ser la olla a presión, cafetera y aquellos que por sus características contengan en su interior vapor de agua a presión. Una mala utilización puede provocar graves quemaduras y explosiones fortuitas.

8. Los trasvases de líquidos (caldos, purés, etc.) en estado de ebullición, pueden provocar graves quemaduras, para lo cual debéis protegeros con los medios adecuados, en especial en época estival.

9. No deberéis utilizar aquellos productos envasados cuya etiqueta no este lo suficiente legible y su aspecto presente síntomas de hinchamiento. Aseguraros de la fecha de caducidad, y si al realizar su apertura se observa escape de algún gas, desecharla.


10. No dejéis al alcance de los niños, elementos cortantes, utensilios con agua o aceite hirviendo, y sobre todo productos químicos sin etiquetar. Las latas abiertas de unos días son focos de hongos muy perjudiciales. Las legumbres secas y las especias, suelen con el tiempo contener ciertos bichitos muy desagradables a la hora de encontrárselos flotando en la sopa. 

Una vez comentado este decálogo de recomendaciones que he ido recopilando de la realización de mis recetas, no queda más que estudiarse bien la que habéis escogido de las que os mando, abastecerse de los ingredientes y ponerse manos a la obra. Todas las del recetario que os mando, han sido realizadas primero por mí para ver el resultado final. Por supuesto algunas las he rechazado y no os las mando.

Recomiendo al principio que se coloquen a la vista todos los ingredientes, dado que no se por qué siempre se olvida uno alguna cosa. Cuando te des cuenta del olvido no intentes remediarlo, es irreversible, salvo que sean condimentos como sal, azúcar, etc.

Saludos

Miguel Sánchez del Río González-Anleo

PRÓLOGO

Asturias, comunidad autónoma de la cual no solo me considero hijo, sino que he aprendido y adquirido la mayoría de mis conocimientos, provenientes de mis antecesores y maestros familiares, ha sido para mi el inicio de mis planteamientos.

Desde la época en la cual los romanos pusieron todas sus fuerzas para lograr convencer al pueblo astur de que sus técnicas de convivencia eran mucho mejor que los castros astures, y que su fuerza podría imponer en Asturias una forma de vida no solo diferente, sino más actualizada y de mejor calidad, hemos venido luchando por mantener nuestras costumbres entre las cuales destaca la forma de subsistir y alimentar tanto el cuerpo como la mente.

No cabe duda que en estos momentos todo el mundo debate la forma más sana de convivencia y sobre todo se debate a cielo abierto que tipo de cocina es la ideal para mantener el cuerpo humano lejos de las fatídicas enfermedades tan abundantes y variables capaces de acabar con nuestro cuerpo.

Todos sabemos que la naturaleza es muy sabia y nuestro cuerpo cuando se encuentra en situación de elección, escoge sin tartamudeos aquello que realmente le sienta bien, rechazando bien antes o después, todo aquello que le es perjudicial. Por supuesto que los ojos siempre van por delante que nuestros  sentimientos, no obstante al final vence lo razonable.

Por lo tanto y sin entrar en elogios por un tipo de dieta determinada, vamos a tratar entre todos los que participamos en este libro, de dar a conocer al lector, amigo y curioso de la cocina, la posibilidad de disfrutar no solo de un rato agradable de lectura, sino de que por su cuenta y riesgo haga participe a su familia, amigos u otras afinidades, de unas experiencias capaces de llegar al máximo de distracción, felicidad y hacer del domingo o fiesta de guardar algo realmente entrañable, ameno y distraído que olvide los momentos tensos y crisposos del resto de la semana. 

No duden mis amigas las amas de casa que pueden recurrir a mi blog siempre y cuando lo consideren oportuno, sin que ello pueda acarrear por mi parte una intromisión en sus quehaceres cotidianos.

Miguel Sánchez del Río González-Anleo